4.14.2014

Gracias por tanto amor, Tati.

Adiós, Tati. Y gracias por tanto amor.

Soy una amante de los gatos. Crecí entre miaus, pelitos y ronroneos. Me han hablado, les he hablado. Me han abrazado, les he abrazado. Hemos jugado y les he adorado. Me acompañaron en buenos momentos, y en otros malos; a la distancia o muy cerquita. Ellos saben cómo, cuándo y dónde. No hacen falta palabras. Los gatos son sabios. Crecí amando a los gatos, pero nunca aprendí a decirles adiós.

Ayer Tati se nos fue... y quiero pensar que está en el cielo de los gatos, porque si existe un cielo, ese es el cielo de los gatos y las buenas almas. Es difícil explicar la tristeza que produce, pero es que Tati estaba enfermito, y no merecía sufrir. Era un gato muy dulce y cariñoso, siempre frotándose contra los rostros de quienes le queríamos. Él sabía que le queríamos.

La verdad es que no sé qué decir. Escribo esto porque necesito despedirme de él de algún modo, y porque me ha llegado al alma lo que ha escrito mi querido misántropo en su blog.


A Tati le encantaba jugar con bolitas de papel. Se las tiraba y él las traía a mis pies para seguir jugando. Y así con todos. La hora del té era clave, porque tenía debilidad por los envoltorios de bolsas de té. Era oírnos y venir corriendo con sus tiernos ojos azules y ese MAU tan característico.



Tati era es el gato de mi madre, el último de tantos corazones peludos y quizá no vuelva a tener más gatos. Porque las despedidas son muy duras. Lo sé.

Me apena muchísimo su adiós. Por lo mucho que le quería mi madre, porque la seguía a todas partes, destilando amor y dulzura, y sé lo mucho que echará en falta esos momentos. Me gustaría poder decirle algo ahora para aliviar esta angustia, pero sé que no será posible y eso me entristece aún más. 

Gracias por ser tan buen amigo, Tati. Gracias por la compañía, por tantas noches que te quedaste conmigo, comprendiendo mi naturaleza nocturna. Gracias por cada beso, cada achuchón y cada caricia. me has hecho muy feliz, y espero haber cumplido mi parte. Gracias por brindarme la oportunidad de cumplir mi sueño de estar rodeada de gatitos. Ya sabes que yo siempre les ayudaré aquí en la tierra. Tú procura seguir jugando donde estés y saluda a los otros peques de mi parte. 

Nunca te olvidaré, precioso.
Esos ojos azules lo decían todo.
Te quiero.

Lamento no haber estado más tiempo a tu lado, pero 10.000 km no impiden que te siga queriendo con locura. Hasta siempre, pequeño angelito.


Este vídeo lo grabé el 18.02.14, al día siguiente de llegar a Argentina.
¡Estábamos muy contentos de vernos! 

10 comentarios:

  1. No podía dar ni recibir más amor. <3

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias por lo que has escrito y por apoyarme tanto estos días. Él tenía debilidad por ti, era un gato muy inteligente. <3 <3

      Eliminar
  2. Lo siento mucho, lo primero que he visto en face, ha sido la foto, y he pensado si tendrias un peludito mas. Acabo de darme cuenta del error, se les quiere tanto...en fin, seguro q esta en el cielo gatuno, junto con todos mis pequeños mininos y los de mi mami. Besitos preciosa...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias. Yo ahora apenas puedo entrar al face o al blog porque veo su foto y me pongo triste. Mi madre lo está pasando muy mal, y es que han sido muchos años juntos... Besos.

      Eliminar
  3. Seguramente ha tenido la vida más feliz que un gato puede desear. Mucho ánimo y no estéis tristes: Allí donde esté, seguro que os dedicará aún muchos maullidos y ronroneos. Besosss

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Miguelón. Es difícil no estar triste, pero bueno... Besos.

      Eliminar
  4. Siempre es una ocasión triste cuando perdemos a un amigo peludo. El mejor consuelo que nos puede quedar es el saber que fue y nos hizo felices.

    ResponderEliminar
  5. Siempre es triste saber que el amigo de un amigo se ha ido, pero cuando lees algo así al menos sabes que mientras estuvieron juntos se ofrecieron mutuamente afecto del bueno.
    Tati estará agradecido por ello, y seguro que tú también.

    ResponderEliminar

Suscríbete a los comentarios