Carta personal al 2014

Querido 2014:

No voy a pedirte muchas cosas ni a caer en los tópicos de salud, dinero y amor. Te pido ilusiones, ganas, energía, fuerza y más felicidad.

Te pido que me ayudes a encontrar la serenidad que me falta, la tranquilidad que necesito.

Te pido que no me dejes caer en la desesperanza, que me recuerdes que todos los días puede salir el sol.

Te pido que me sorprendas, que me hagas reír, que te unas a mis locuras; que apenas me des tiempo para escribir en el (¿los?) blog y me acompañes en mil horas de maravilloso estudio.

Te pido que traigas a la pantalla alguna serie que me emocione, además de apasionarme. No es que sea importante, pero ese ocio es parte de mi vida, ya lo sabes.

Te pido que caiga del cielo un libro que no pueda dejar de leer. (Y que no sea negro, que la liamos.)


Te pido el mejor hogar para mis peques en acogida: Mika, Emily y Flor.

Te pido despedirme de la angustia, la ansiedad y los malos ánimos que me acompañan a veces y desde hace tanto tiempo.

Te pido afianzar las pocas pero buenas amistades que tengo, que cubras de dicha a toda mi familia y que me permitas seguir caminando y creciendo junto a esa persona que tanto quiero.

Te pido más abrazos, siempre más... es que me gustan.

Y te pido que sonriamos, porque la sonrisa de hoy, es el bien del mañana. O eso creo.


Gracias, de corazón.

Florencia.